domingo, 13 de diciembre de 2015

Tarzán en Cajamarca

 


La historia es vieja y conocida, y sin embargo nos atrapa con el encanto de la primera vez en cada oportunidad que nos volvemos a topar con ella. Tarzán (en inglés: Tarzan), tiene más de cien años desde que su creador, Edgar Rice Burroughs, la publicó en una revista, allá por el año de 1912. Ha sido llevada al cine, a la televisión y tiene varias versiones en dibujos animados.

 

La ficción inicia en 1888, con la misión que la corona británica le encomienda a John Clayton: visitar una de las aldeas africanas bajo el mando de Inglaterra, y resolver los problemas con los nativos. Clayton viaja por mar con su esposa embarazada y termina abandonado en una isla tras un motín que cobró la vida del capitán del barco.

 

Alice Rutherford, la esposa de Clayton, da a luz un niño pero ella fallece al poco tiempo del alumbramiento. John Clayton también muere más tarde atacado por un gorila, y el niño es rescatado por Kala, una mona joven de la tribu mangani que había perdido accidentalmente a su cría. El niño, Tarzán, que significa “piel blanca” en idioma mangani, crece y se hace adulto en el seno de la familia de simios.

 

La novela ha sido escenificada muchas veces con pequeñas variantes. La más famosa, probablemente, sea la versión que nos embelesaba en las matinales de los sábados en los sesentas y que, en blanco y negro, protagonizaba el nadador Johnny Weissmuller y su compañera Jane personificada por la encantadora actriz Maureen O´Sullivan.

 

La versión cajamarquina de esta apasionante historia, una obra musical, fue estrenada anoche en el cómodo auditorio del Davy College. Durante cerca de dos horas más de cincuenta niños del grupo de actuación de ese centro de estudios, bajo la guía del experimentado director de teatro Henry Manosalva, nos llevaron con la imaginación al corazón de la selva africana para revivir con ellos las aventuras del afamado hombre mono.

 

La puesta en escena del musical “Tarzán” es un esfuerzo encomiable de la comunidad educativa Davy College que ya en otras oportunidades nos ha deleitado con distintas obras de teatro. “Una producción musical es de vital importancia en la vida anual de una escuela. Ningún otro evento como éste demanda tanto del trabajo en equipo para armonizar la coreografía, la música, la actuación y el diseño. Ningún otro tipo de evento reúne a estudiantes de diferentes edades para trabajar juntos en un propósito común”, dice el Director del colegio, Ian Raitt.

 

Los chicos -niñas y niños- cantaron, bailaron, actuaron y se desplazaron por el escenario bajo un juego de luces que mantuvo entretenido al auditorio durante todo el espectáculo. Las funciones se repetirán hoy jueves 25, mañana viernes 26 y el sábado 27. Vale la pena asistir, puede que de pronto –como decía un novelista- nos maravillemos disfrutando de las emociones que despierta el teatro y que enriquecen la vida que nos rodea.